Empezar un blog nunca fue tarea
fácil y más con la cantidad que proliferan en estos tiempos.
Mi intención es recopilar todas las recetas que me gustan y me funcionan y la entrada de hoy es uno de esos “grandes
éxitos” Allí donde ha ido, ha triunfado. Llegó a mis manos a través de una
compañera de trabajo de mi madre, cuando yo estaba en el instituto. Es un
bizcocho de esos jugosos, nada empalagoso, diría que adictivo. Gusta a grandes
y pequeños. Y el toque de las nueces le aporta lo justo de crujiente. Por otra parte no soy amante de las medidas en tazas. Donde esté una receta en gramos que se quite lo demás pero ésta funciona. Por si entran dudas he utilizado una taza de café con leche.
Para finalizar esta primera entrada, tengo que agradecer a alguien la
aventura de empezar este blog. Helena de El Pastelito Valiente. ¡Mil gracias
por ese empujón y tus consejos! Está pendiente un viaje a Canarias :-D
Sin más, os dejo con la receta. Espero que
os guste.
Ingredientes (para un molde de 18 x 6 cm)
- 2 plátanos machacados
- 2 huevos
- 1 taza y ½ de harina tamizada
- ½ taza de azúcar
- ½ taza de aceite
- 1 cucharadita de levadura
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 1 cucharadita de pasta de vainilla
- 15 nueces peladas y partidas en trozos
Preparación:
- Batir los huevos con el aceite hasta conseguir una crema espumosa.
- Anadir el aceite y después la harina tamizada junto con la cucharadita de levadura la de bicarbonato y la de vainilla con movimiento envolvente para que no se bajen los huevos.
- Una vez homogeneizada la mezcla añadir en pequeñas porciones el plátano machacado.
- Por último, añadir las nueces picadas.
- Engrasar el molde con la mezcla obtenida y cocer al horno 180° Dejar enfriar antes de desmoldar.
